viernes, 27 de noviembre de 2009

De cómo Cecilia pasa frío (y sed y hambre y desamor) por ser un poco idiota


Dí por hecho que la ventana estaba estropeada, que no podía cerrarse. Dí por hecho, como siempre. ¿Para que intentarlo si iba a seguir igual?


Después de mi crisis de frío, alguien llegó y la cerró de golpe.
No estaba rota.

1 comentario:

Princess Valium dijo...

Acurrúcate entonces, deja que te quiten el frío, que te abracen...y sonrie.
Besos