miércoles, 30 de noviembre de 2011

Veintiocho



Empieza a ser tarde, ahora sí (y no lo digo entristecida, sólo consciente de mis primeras arrugas, de un desgaste inevitable) para la expectación y el brillo.

Un año más y todo es lo mismo, decrépito y anodino, lo mismo de lo mismo,
no puedo esperar más la evolución que no llega.

Siento disgustarte, prometía algo, pero ahora sí, ahora sé que no podré ofrecer nada mejor.




1 comentario:

Paula Orobón dijo...

Aunque desee noe star de acuerdo con tus palabras, me siento identificada con ese pasar el tiempo como si nada, sin ese cambio que quizá todos esperemos. Un abrazo