lunes, 28 de noviembre de 2011

Miedo



Sucederá sin esperarlo.
Se posará sobre tu hombro
y pronunciará tu nombre,
ese cuervo negro que asoma
cada noche
para no dejarte dormir.






2 comentarios:

Paula Orobón dijo...

Es hablar de cuervos y esperar que en cualquier momento aparezca el de Poe para gritarme aquello de "nunca más". El tuyo es igualmente inquietante y una maravillosa forma de describir eso que llamamos miedo.

Cecilia Sainte-Naïve dijo...

Sí, es verdad, pensé en él justo después de aparecerse el poema-cuervo. Pero al menos no trajo malas noticias, sino unas palabras que agradezco. Gracias, Glauka, por pararte un ratito.