lunes, 29 de octubre de 2007

JOSÉ ÁNGEL VALENTE



Caminabas despacio.

Tu cuerpo fatigado aún arrastraba
la absoluta ruina
de ti.

Te acariciaba tenuemente el sol.
Tú ibas disolviéndote en su luz.

Quedaban todavía algunos pasos.
¿Hacia dónde?
Ni siquiera sabías
con certeza cuántos podrías dar.

(La certeza)


(De Fragmentos de un libro futuro)


1 comentario:

Vanlat dijo...

Y los dabas... seguías andando, tecleando, respirando, sintiendo... aún cuando parecía que no lo harías más...

Liebe Cocò... cuanto he echado de menos tus escritos