Nadie puede seguir el curso de dos ríos
bajo las mismas nubes o las mismas estrellas.
Permanecí donde confluyen y quise retenerlos,
mas siguieron su curso
bajo otros cielos, otras nubes.
De Poemas a mi muerte (1989)
Late, late, late, pequeñísimo corazón de un pájaro al borde de su rama precipicio.
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